Esas Palabras Muertas que nunca pronunciaré,
esas que han muerto entre el cielo y el mar,
dentro del abismo profundo de mi garganta
en lo más recóndito de mi ser.
Eso, lo que soy, un árbol con un nido solitario
una rama con aves disecadas
esas palabras ahogadas,
éste barrio de timidez...
La timidez tiende al miedo
el rechazo es un chacal hambriento
que muerde prodigiosamente el sentimiento
y éste a su vez, recurre a el silencio.
Silencio! Bendito Silencio!!!
que mira, que oye y que llora:
daran, daran, dauuuun!!